La firma ha anunciado hoy que llegará a los cuarenta mil millones de facturación en este ejercicio. También dio a conocer su apuesta por la sostenibilidad. Sus neumáticos de diente de león y sus neumáticos fabricados con botellas de plástico reciclado son algunas de las novedades más comentadas de la firma en los últimos meses.
John Ander, responsable del mercado ibérico de la compañía, compartió con la prensa las líneas estratégicas del grupo y su situación económica en las diferentes divisiones. La parte del caucho sigue siendo la más importante y representa un 52% de su actividad, seguida por la parte Automotive con un 45%. El grupo espera cerrar el ejercicio una facturación próxima a los cuarenta mil millones de euros, dando empleo a 190.875 personas.
Ander se refirió en primer lugar a la situación económica en España con una deuda sobre el PIB que continua creciendo y una inflación elevada. Las matriculaciones de vehículos se han estancado y la antigüedad media del parque español ha subido a 13,2 años. En los últimos cinco años se ha perdido un 35% de las matriculaciones. La propiedad de los vehículos se está desplazando desde la propiedad particular de los mismos hacia su propiedad por parte de las empresas, especialmente de alquiler de vehículos. En cuanto al mercado de neumáticos, Ander afirmaba que se encuentra en un volumen plano.
El responsable de la marca no ofreció cifras sobre los resultados en España donde han apostado por unos productos asequibles que dan menos margen a la marca. Si bien, afirmaba que Continental sigue siendo la marca Premium en sectores como camiones.
Continental está centrada en la sostenibilidad en las distintas fases de su operativa, desde el aprovisionamiento, las operaciones, la fase de uso del neumático y el final de vida. Uno de sus objetivos es que en 2050 todos los materiales se obtengan de forma sostenible. En esta línea ya ha fabricado neumáticos para bicis de diente de león. Sus centros productivos tienen plantaciones de la misma, evitando el coste de la distribución. El Urban Taraxagum es el neumático que se usa en el mundo de la bici sustituyendo al caucho, con unos resultados tan exitosos que son los neumáticos usados para competición.
La marca también realiza medidas de ahorro energético en todas su plantas de producción. Y diseña los neumáticos mejorando la resistencia a la rodadura, lo que permite menores consumos.
En 2050 quieren que el 100% de sus neumáticos sean renovados y reciclados. En una apuesta por la economía circular, quizás, lo más llamativo de esta marca haya sido lanzar una línea de neumáticos fabricada con botellas de plástico recicladas. Una solución que ha sido recientemente reconocida como producto altamente innovador.