El delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el gerente de EMT, Alfonso Sánchez, se reunieron el 9 de diciembre, en la sede central de EMT, con un equipo científico y docente de la UNED para celebrar la Comisión Mixta de Seguimiento de la Cátedra EMT-UNED de Calidad del Aire.
Encabezando la representación de esta universidad han estado su rector, Ricardo Mairal, y su vicerrectora, Rosa Mª Martín, acompañados también por el director de dicha Cátedra, el profesor José Luis Aznarte. Con la formación de un grupo de trabajo específico, se pretende analizar la huella de carbono en el seno de EMT y poner de relieve los avances conseguidos en la reducción de gases de efecto invernadero, en consonancia con la actual Estrategia de Sostenibilidad 360 del Ayuntamiento de Madrid.
La Cátedra EMT-UNED llevará el título de Estudios dinámicos sobre calidad del aire en la ciudad de Madrid y seráun aula universitaria pionera en su género. Las partes implicadas se comprometieron en 2019 a colaborar en estos estudios durante un periodo de 3 años. El contenido de esta cátedra se focaliza en un análisis de la huella de carbono con modelos predictivos. Los estudios que se lleven a cabo en esta cátedra van a permitir evaluar los resultados de los planes actuales en marcha para la mejora tanto en la flota de autobuses como en las instalaciones de EMT.
EMT, como empresa consciente del impacto que tiene de la movilidad en el medio ambiente, lleva muchos años apostando por un proceso de máxima descarbonización y por una agenda estratégica que logre alcanzar la meta de una flota 100% “verde” o “limpia”. Actualmente, la empresa municipal cuenta con un 83% de “flota verde” y, para el horizonte de 2027, uno de cada tres autobuses en Madrid será eléctrico y el resto de la flota lo constituirán modelos propulsados por Gas Natural Comprimido (GNC).
No solo la flota de autobuses municipales participa en esta gran apuesta por la descarbonización. EMT está llevando a cabo otras actuaciones en materia de eficiencia energética en sus centros de trabajo y en todos los demás servicios que presta. Buen ejemplo de ello son la aplicación de planes de optimización del consumo energético en sus edificios e instalaciones y el desafío alcanzado de garantizar que entre un 30% y un 40% del consumo eléctrico sea de origen renovable con el objetivo de poder llegar al 100% a medio plazo, entre otros.
Asimismo, EMT se comprometió con el Ministerio de Transición Ecológica – a través del Proyecto CLIMA – a la reducción de 21.300 toneladas de gases de efecto invernadero antes del año 2022. Este compromiso ambicioso se ha cumplido, hasta ahora, con éxito, como demuestran las certificaciones correspondientes a 2019. Más recientemente, EMT ha sellado un acuerdo marco de colaboración con el Centro Nacional del Hidrógeno (CNH2) para contribuir al desarrollo tecnológico y a la implantación de tecnologías aplicadas a este combustible.