Desde el inicio de la pandemia, Hispacold ha puesto todo su empeño para contribuir con todo su bagaje a ofrecer soluciones tecnológicas para un transporte de pasajeros libre de microorganismos, gérmenes, alérgenos y virus, incluido el SARS-CoV-2. Entre algunas de las líneas de trabajo desarrolladas por Hispacold en este sentido, se encuentra la ampliación y optimización de su gama Breeze.
Los sistemas de climatización de la gama Breeze están diseñados para trabajar con mezcla de aire interior y aire exterior de renovación, que antes de ser tratada térmicamente e introducida en la cabina de pasajeros y conductor, pasa por una sección de filtración donde se eliminan gran parte de las partículas nocivas, mejorando así la calidad del aire interior.
Los bio aerosoles (partículas en suspensión en el aire, de origen biológico o con actividad biológica, que pueden afectar a seres vivos a través de procesos infecciosos, alérgicos, tóxicos e irritantes) son la principal vía de transmisión de enfermedades infecciosas.
Los sistemas de climatización de la gama Breeze disponen de características que garantizan el confort térmico de los pasajeros y conductores, y que además contribuyen a proteger su salud.
La calidad del aire interior conseguida a través de la ventilación y la etapa de filtración, es una de las claves para prevenir la transmisión de enfermedades entre pasajeros.
Los sistemas de climatización de la gama Breeze disponen de características que garantizan el confort térmico de los pasajeros y conductores, y que además contribuyen a proteger su salud.
La calidad del aire interior se ve afectada por el nivel de ocupación de pasajeros. El caudal de aire exterior recomendado por la normativa oscila entre 2,5 y 4 l/s por persona, por lo que deberán garantizarse al menos entre 10 y 16 renovaciones completas del aire en el interior del vehículo cada hora. Esto supone que el tiempo para renovar completamente el aire en el interior del vehículo debe estar comprendido entre 4 y 6 minutos.
El diseño de la gama Breeze de Hispacold permite introducir caudales de renovación entre 2.000 m3/h y 4.900 m3/h, con lo que la renovación completa del aire interior se puede realizar entre 40 y 90 segundos, mejorando sustancialmente el valor determinado por la normativa.
Para conseguir esta capacidad de renovación, es necesario que los autobuses dispongan de sistemas de extracción del aire interior que extraigan la misma cantidad de aire interior que el caudal de aire de renovación introducido en el vehículo.
La gama Breeze incorpora sistemas de extracción propios que complementan la capacidad de extracción habitual de los vehículos.
Se recomienda la incorporación de un sistema de extracción de aire interior en aquellos vehículos que no dispongan de ello, siempre que la operación de los vehículos no permita la apertura de puertas con cierta frecuencia.
En modo 100% aire exterior, al no existir recirculación, los equipos de climatización toman exclusivamente el aire del exterior y lo impulsan al interior a través de los conductos de aire acondicionado que se sitúan encima del pasajero.
Este aire exterior introducido debe reemplazar al aire en el interior del vehículo, para lo cual, el aire interior sale del vehículo, habitualmente por unos conductos situados en el suelo, produciéndose un flujo de aire vertical de arriba hacia abajo. La velocidad de esta corriente de aire vertical facilita el arrastre de los bio aerosoles, dificultando así el contagio cruzado entre pasajeros.