King Long sigue afianzándose como marca referente en electromovilidad tras incorporar recientemente en toda su gama de autobuses y autocares eléctricos la opción de carga rápida acelerada, la cual reduce considerablemente los tiempos de recarga en los buses y aumenta la eficiencia operativa durante las horas de servicio.
Este avance tecnológico facilitará a las empresas de transporte urbano y/o con líneas de corto y medio alcance cargar los autobuses hasta los 260 kW de potencia mediante el uso de dos mangueras con tomas CCS-2 conectadas al bus de manera simultánea -en vez de cargarlo con una sola manguera hasta los 150 kW como se venía haciendo hasta la fecha– ayudando así a alargar la vida útil de las baterías al fomentar el uso continuado del proceso de la recarga durante el corto, medio y largo plazo sin llegar a agotar los ciclos de carga.
Además, la opción de implementar dos conectores CCS-2 en los buses eléctricos ofrece al operador un cambio de postura muy positivo sobre el concepto de autonomía limitada, permitiendo a partir de ahora emprender rutas cada vez más largas sin preocuparse por la energía restante.
Esta mejora en la carga rápida admite combinaciones entre la conexión de dos mangueras del mismo cargador o de cargadores diferentes y marca un hito importante en la evolución de la tecnología de carga, acercando al operador a una transición más rápida hacia el transporte sostenible cero emisiones de pasajeros.
Con esta innovación, King Long se posiciona como líder en la adopción de la tecnología de carga acelerada en la industria de vehículos eléctricos.